SRILA NITYANANDA PRABHU CON
SRI CAITANYA MAHAPRABHU
Cuando Él llegó a Nadia se escondió en la casa de Nandana Acarya, incontrolado por los sentimientos de encuentro en la separación, Nimai Pandit, al percibir Su presencia envió a Haridas Thakura y a Srinivas Acarya en su búsqueda, pero después de una larga búsqueda fallaron en el intento.
No soportando más el ansia del encuentro, Nimai mismo fue a la casa de Nandana Acarya, el encuentro fue tan intenso que estuvieron abrasados por horas, todos los presentes estaban asombrados al ver tan sublime lila del Señor. En este mismo lugar se estableció un templo llamado Sri Gaura Nityananda.
Capítulo 4,se describe este trascendental encuentro
Dentro de Su corazón el Señor Nityananda tenia la certeza de que este Señor Visvambhara (Caitanya) quien estaba frente a El no era otro que su amado Señor Supremo. Abrumado de bienaventuranza, Nityananda Prabhu era incapaz de moverse, Él miraba sin pestañear el hermoso rostro del Señor. Internamente ansiaba gustar la belleza con sus labios y beberla con Sus ojos; quería abrazarlo con Sus manos y percibir Su fragancia con Su nariz.
Ante el asombro de todos, el Señor Nityananda enmudeció completamente encantado por la belleza del Señor. El Señor Gaurachandra es la Superalma en el corazón de todos; por ello, conocía el corazón del Señor Nityananda. De este modo estaba planeando los medios para revelarse a Sí Mismo al Señor Nityananda, así El Señor le indicó a Srivas Pandit que recitara un verso del Srimad Bhagavatam.
Srivas entendió, e inmediatamente recito un sloka describiendo la belleza de Krishna: "En una ocasión, Krishna, vestido como un bailarín, entró al bosque de Vrindavana. Una pluma de pavor real le fue puesta en Su corona. Sus oídos estaban decorados con unos graciosos aretes de gotas amarillas. Su atuendo dorado brillaba y portaba la joya Vaijayanti alrededor de Su cuello. Esa tierra que llevaba la impresión de Sus pies de loto, marcada con los signos de la caracola, el disco, etc. es Vrindavana, Su lugar de pasatiempos trascendentales. El Señor puso la flauta en Sus labios y toco en ella. Llenándola de Su nectáreo sonido. Al mismo tiempo, Sus amigos vaqueritos estaban describiendo Su belleza".
En ese momento, El Señor Nityananda recuperó Su conciencia externa y empezó a llorar con lagrimas de júbilo. Mientras más escuchaba el verso, más incrementaba Su locura de amor por Krishna. Él rugió extáticamente llenando el universo y perforó a través de la cubierta de este mundo material. El Señor Nityananda hizo un salto, rompiendo la tierra, y todos pensaron que los huesos de Su cuerpo estaban destrozados. Al contemplar esto, los Vaisnavas se pusieron muy temerosos y gritaron fuertemente: "Krishna por favor sálvalo, Krishna por favor sálvalo"
El Señor Nityananda rodó por el suelo, Su cuerpo cubierto con lagrimas de amor. Largos y frecuentes suspiros escapaban de Su boca mirando profundamente el rostro del Señor Visvambhara. El Señor Nityananda sentía gran éxtasis, y seguido Se reía en voz alta. Algunas veces saltaba y bailaba, algunas veces se golpeaba, y otras veces permanecía en silencio cabizbajo.
El Señor Gaurachandra y todos los devotos empezaron a llorar al ver tal absorción y locura de amor por Krishna. Se hizo imposible para los Vaisnavas mantener a Nityananda Prabhu quieto. Cuando los devotos fallaron, El Señor Visvambhara sostuvo a Nityananda prabhu en un abrazo. En cuanto el Señor Nityananda fue abrazado por Sri Caitanya, inmediatamente se tranquilizó. El Señor, a quien estaba totalmente rendido, lo abrazaba, así que Nityananda Prabhu se dejo abrazar sin esfuerzo.
El Señor Caitanya derramaba sobre el Señor Nityananda, con éxtasis, lagrimas de amor. El Señor Nityananda estaba afligido por la flecha de amor extático de Dios y el Señor Caitanya lo sostenía justo como el Señor Ramachandra había sostenido a Laksmana cuando estaba postrado, inconsciente y vacío de toda fuerza.
Ambos el Señor Nityananda y el Señor Caitanya lloraban, sobrecogidos de gozo. La intensidad del amor entre el Señor Caitanya y el Señor Nityananda solo puede ser descrita con el ejemplo de la relación amorosa entre el Señor Ramachandra y Laksmana.
Cuando el Señor Nityananda salió de su trance de éxtasis, todos los devotos empezarn a cantar fuertemente el nombre de Hari. Visvambhara abrazaba a Nityananda Prabhu y Gadadhara Pandit sonreía, pensando como los roles de Sus Señorías se habían cambiado.
Él pensaba: "Nityananda Prabhu como Ananta Deva rinde servicio al Señor Visvambhara transformándose en la cama donde el Señor Narayana siempre descansa, pero hoy, Su orgullo como servidor ha sido quebrado y reposa en el abrazo del Señor Visvambhara".
Gadadhara Pandita estaba muy consciente de las potencias del Señor Nityananda, y el Supremo Señor Nityananda conocía los más íntimos pensamientos de Gadadhara Pandita. Todos los devotos estaban llenos de jubilo al encontrar al Señor Nityananda y sus mentes estaban empapadas en pensamientos acerca de Él. El éxtasis que experimentaron el Señor Visvambhara y el Señor Nityananda al encontrarse era imposible de expresar a través de palabras pero encontró expresión en las continuas lagrimas de gozo de Sus ojos que empapaban el corazón.
El Señor Visvambhara dijo: " Este es el día más glorioso de Mi vida. Hoy he sido la encarnación de la devoción amorosa al Señor Supremo, la cual es la esencia de los cuatro Vedas. Tal intensidad de éxtasis solo puede ser manifiesta por el Supremo Señor mismo. Aquellas almas afortunadas que han podido presenciar estos síntomas de Su amor devocional nunca serán rechazadas por el Señor Krishna. Ahora entiendo que Tu, Señor Nityananda, eres la manifestación corpórea de la energía del Señor. No eres diferente a Él. Las entidades vivientes pueden obtener el servicio devocional amoroso a los pies de Krishna simplemente por adorarte. Tu purificas a la manifestación cósmica entera, y Tu naturaleza trascendental es inconcebible, incomprensible y esotérica. Eres la personificación del mas elevado amor extático por Dios. Un solo momento de asociación contigo, puede disolver millones y millones de pecados. Entiendo la intención del Señor Krishna de purificarme y redimirme al darme Tu asociación. Es mi gran fortuna haber contemplado Tus pies de loto. Y sé que si adoro Tus pies de loto, seguramente recibiré el amor de Krishna"
El Señor Nityananda siempre estaba absorto, y hablaba como un niño inocente e inquieto. Entendía que el Señor Caitanya ha descendido a este mundo material, de modo que cuando respondió, lo hizo con sus manos juntas y gran humildad. Se había sentido muy avergonzado y tímido cuando el Señor Visvambhara lo glorificaba, y así, a través de gestos, palabras e indicaciones le explico todo en detalle.
El Señor Nityananda dijo: "He visitado extensamente todos los lugares de peregrinaje, pero solo pude ver el lugar y no a Krishna, el Supremo Señor. Pregunté a algunas buenas personas porqué sus altares estaban vacíos. "No lo veo en Su lugar", dije. "¿Dónde esta Krishna? ¿Dónde se ha ido?" Todos contestaron: "Krishna se ha ido a Gaudadesa, Bengal.
Él estaba en Gaya recientemente y no hace mucho regreso a Bengal" Cuando estuve en Nadia fui recibido por el canto jubiloso del Santo Nombre del Señor, y alguien me dijo que el Señor Narayana, la Suprema Personalidad de Dios ha aparecido aquí. Escuche que en Nadia hasta las almas más miserables pueden obtener su liberación. De manera que siendo yo un miserable tan abominable, he venido aquí". El Señor Visvambhara contestó: "Somos muy afortunados de que un devoto como Tu se encuentre entre nosotros hoy, y agradecemos al Señor por haber contemplado Tus extáticas lagrimas de amor por Dios"
Mientras se adoraban el uno al otro, se incrementaba el asombro de todos". Gadadhara Pandita dijo: "Estas en lo cierto Murari, parecen ser exactamente iguales al Señor Ramachandra y Laksmana".
Otro Vaisnava dijo: "Son el Señor Balarama y el Señor Krishna".
Alguien mas dijo: "Yo no tengo mucho conocimiento pero por lo que he observado, parece que el Señor Krishna ha tomado a Ananta Sesa en sus brazos". Alguien más comentó: "Parecen dos amigos, Su amoroso y afectuoso intercambio es justo como la relación entre Krishna y Arjuna".
Algunos otros estaban diciendo: "Tienen una asociación tan intima el Uno con el Otro, que no podemos entenderla, y solo hablan en signos". Así los devotos expresaron, dando sus diferentes opiniones, su jubilo de tener al Señor Nityananda entre ellos.
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